top of page

Las benditas crisis

La palabra crisis viene del griego (krisis) y este del verbo (krinein) que significa “separar” o “decidir”. Y es que es bien sabido que a nadie le gusta pasar por una crisis ya sea sentimental, emocional, económica, existencial, etc., sin embargo, a la mayoría nos ha tocado pasar por al menos una a lo largo de nuestra vida y eso no quiere decir que sea malo debido a que las crisis traen consigo un golpe de despertar, ya que nos traen conciencia para conocer realmente quienes somos y abrir el panorama de aquello que debemos cambiar.



Las crisis ponen de manifiesto nuestras limitaciones y nos obligan a desempolvar nuestras capacidades y dones olvidados. Una crisis nos carga de energía desesperada y nos pone a marcha forzada haciendo lo inimaginable, pero si no las atendemos también puede ser que nos paralicen.


Aquí te menciono algunos pasos para poder transitar de una mejor manera una crisis:

  1. La vida es cíclica. Aceptar que la vida es cíclica y que a lo largo de nuestra vida estaremos enfrentando diversas adversidades.

  2. Acepta los cambios. Tenemos que aceptar que lo único que podemos controlar es lo que sí está bajo nuestra responsabilidad, es decir aquello que depende totalmente de nosotros mismos.

  3. No siempre tenemos que ser fuertes. A veces necesitamos deshacernos en pedazos para volver a construirnos y seguir sobre el camino. Todos hemos tenido días malos, en los que sentimos que no podemos empujar más y en donde las dudas y los miedos se hacen más latentes y es justo aquí cuando sale a relucir nuestro cansancio, irritabilidad y nuestro enojo contenido. Lo que quiero decirte es que no hay nada de malo en estos días y en mostrar tu vulnerabilidad, hemos sido fuertes y lo seguiremos siendo, pero por ahora permítete habitar esos sentimientos de vulnerabilidad.

  4. No eres víctima. Cuando te sientes una víctima vives la vida a partir de lo que te toca y te conformas, siendo un espectador que se queda solo esperando y enganchado solo en explicaciones y excusas. Cuando te instalas en el papel de víctima te sientes resignado y paralizado viviendo desde la queja y tus pensamientos se enfocan en que las cosas malas solo te suceden a ti, sin embargo, cuando te haces responsable de aquella circunstancia que te ha tocado vivir y creas a cada momento la circunstancia que necesitas para estar bien te vuelves protagonista de tu vida, lo que quiero decirte es que no te estaciones en la crisis y preguntate que vas a hacer con aquello que te ocurrió.

  5. Acciona. Una vez que transitaste por una crisis, al final podemos ver que este obstáculo puede ser una oportunidad para cambiar aquello que es necesario en nuestra vida, tomar acción y buscar alternativas te alejará de quedarte instalado en tu crisis.

  6. Enfócate en el aprendizaje. Al final de haber transitado la crisis pregúntate que es aquello que aprendiste de lo que te ocurrió y que te servirá para el futuro. dad para cambiar aquello que es




Si estás transitando por una crisis recuerda que tarde o temprano va a llegar el día en que todo marche mejor ¡créelo! solo necesitas trabajar en ti y en la manera en cómo estás observando al mundo y puedes preguntarte: ¿Qué me viene a mostrar esta crisis? ¿Qué es aquello que no estoy viendo? ¿Qué necesito aprender y trascender? .







Al final debemos recordar que la paz no es estar en un lugar en silencio, paz significa que a pesar de estar en medio de tus circunstancias existe calma y serenidad en tu corazón porque tarde o temprano sabrás resolver tus conflictos.














Toda crisis tienen tres cosas: Una solución, una fecha de caducidad y una enseñanza para tu vida.


¡Hasta la próxima!

KSoto







27 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page